Este horno es el que compramos nosotros en su día.
¿Porqué nos decidimos por este modelo?
Sinceramente es el que estaba en Adrizar (el taller donde yo aprendí a trabajar la pasta de plata). Me pareció muy fácil de usar y de pequeñas dimensiones, algo que me podía permitir tenerlo en casa fácilmente.
Facilita cocer varias piezas a la vez
Mi idea principalmente era dar cursos de pasta de plata, el horno facilitaba cocer muchas piezas a la vez y eso es algo imprescindible para poder montar un curso intensivo.
Y si quieres dar color a tus piezas…
Además los esmaltes no se pueden cocer de otra forma, así que me decidí a hacer esta inversión.
¿Es fácil de usar?
Es muy fácil de usar, sólo hay que ajustar la temperatura en el programador para que empiece a subir el calor. Además la puerta del horno tiene un tirador muy cómodo que se abre con una sola mano, dejándote la otra libre para introducir tus joyas en el horno.
Éste no es hermético, necesita ventilación para poder sacar todo el humo que produce la pasta de corcho al quemarse. Este modelo en concreto tiene un agujerito en medio de la puerta lo que además de favorecer la ventilación, permite ver un poco lo que está ocurriendo dentro.
Un mejor acabado de las piezas
Como os comenté en el twitter, el acabado de las piezas que permite el horno no lo he visto con ningún otro método de cocción. Al tener la temperatura adecuada y constante, las piezas tienen un acabado más resistente y brillante. Es verdad que es un poco caro, pero os lo recomiendo si vais a hacer muchas joyas. Al final lo caro es encontrarte con piezas con defectos y roturas debido a un exceso de calor durante la cocción.
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